El principal sospechoso es el tesorero municipal, suspendido de empleo
Teresa Villaverde llegó a la alcaldía del municipio coruñés de Lousame (3.657 habitantes) el 20 de septiembre pasado, cogiendo el relevo de Santiago Freire Abeijón. Este abandonó el cargo para ir en la lista del PP por A Coruña en el puesto octavo, lo que le aseguraba un escaño en el Parlamento de Galicia, como así se confirmó en las elecciones del 21 de octubre. Seguramente no sabía la mujer que prácticamente un mes después de asumir la máxima responsabilidad municipal se iba a encontrar con un presunto desfalco en las cuentas que, inicialmente, no baja de los 200.000 euros, a la espera de analizar pagos más allá de un año.
Las sospechas de que algo extraño había ocurrido en las cuentas del Concello de Lousame empezaron cuando, hace unas semanas, se detectó que un pago de 17.000 euros efectuado a la compañía eléctrica Gas Natural no había llegado a la cuenta de la suministradora, y, sin embargo, en la contabilidad municipal sí aparecía el justificante de haber abonado dicha factura. Según parece, al revisar exhaustivamente el documento de pago se comprobó que el ingreso había sido desviado a una cuenta distinta a la de la empresa energética, pero a simple vista no se apreciaba porque la que se supone que se trata de una falsificación era muy minuciosa.
Una vez que se constató que se había producido una alteración en el procedimiento de pago telemático, y cuya intencionalidad se evidenciaba en la perfeccionista falsificación, a lo largo de varios días, fuera de los horarios laborales para evitar que funcionarios y empleados municipales pudiesen sospechar, se realizó un repaso a los pagos efectuados por el Concello de Lousame por espacio de un año, aproximadamente.
Punta del iceberg
Al parecer, el desvío del pago a Gas Natural solo es la punta del iceberg, ya que se han contabilizado otras irregularidades contables semejantes que en su conjunto superan los 200.000 euros, cifra que corresponde a la revisión de las cuentas por espacio de un año, de ahí que no se descarta que la apropiación de fondos sea todavía mayor.
Una vez que se constató la existencia de las posibles irregularidades, los hechos fueron puestos en conocimiento de la Fiscalía de la Audiencia Provincial de A Coruña, que ha abierto una investigación. El principal sospechoso es el tesorero municipal, Francisco González Lorenzo, conocido por Paco, quien fue suspendido de empleo hace un mes, ya que todas las pruebas recabadas y aportadas al fiscal apuntan hacia él.
El hermetismo en la casa consistorial es absoluto. El funcionario, cuando fue instado a abandonar su puesto, indicó a sus compañeros que no se encontraba bien y que tenía que ir al médico, por eso en las oficinas municipales creían que estaba de baja por enfermedad.
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