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jueves, 13 de diciembre de 2012

Nos vamos de guateque: La tecnología más 'fashion'



Los tocadiscos maletín son todo un clásico. VEA MÁS IMÁGENESLos tocadiscos maletín son todo un clásico. VEA MÁS IMÁGENES
Dicen los expertos en música que no hay sonido más real que el de los vinilos. El tocadiscos se ha convertido en un objeto para melómanos que disfrutan con el 'golpecito' de la aguja al caer sobre el disco o con ese sonido en blanco antes de que el siguiente surco dé paso a una nueva canción.
Nacidos en la década de los 20, comenzaron a comercializarse entre las personas más pudientes y luego se fueron popularizando. En España, protagonizaron muchos guateques de la década de los 60 y 70. Y ahora, lejos de haber desaparecido, siguen contando con un público fiel.
Los hay de distintos estilos: más rockeros, más clásicos, de madera, de metal, imitando a los antiguos gramófonos, de maletín, etc. Todo para encajar con el perfil y necesidades de cada usuario.

No sólo tocan discos

Eso sí, por eso de 'adaptarse o morir', los tocadiscos ya no sólo sirven para eso, para 'tocar discos'. La mayoría incluyen radio y CD, como mínimo, y algunos tienen ranura para USB y/o tarjeta SD.
Se han convertido en una especie de minicadenas que reproducen casi todos los formatos y, además, transforman el sonido de los vinilos a mp3 o lo graban directamente en el iPod, por ejemplo.
En un 'guateque' como los de antes; en casa mientras se degusta una copa de vino; en una reunión de amigos... Los tocadiscos se adaptan a todo tipo de situaciones y, además, decoran.

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